El Roscón de Reyes es la tradición gastronomica española del 6 de enero por excelencia. Con más de 500 años de historia, hay dudas sobre su origen. Pero parece ser que el gran promotor del dulce fue la Corte del rey francés Luis XV.
Según cuenta la historia, el cocinero de la Corte, que era de origen eslavo, quiso regalar al Monarca el día de la Epifanía un roscón tradicional de su tierra. Dentro del dulce colocaron un regalo: un medallón de diamantes que pudo comprar gracias a la colaboración de todo el personal de la corte.
El Rey quedó prendado del regalo y del magnífico sabor del roscón y se dedicó a propagarlo colocando una moneda en su interior como sorpresa. Así, mientras la tradición se iba perdiendo en Europa del Este, el resto de la aristocracia europea fue seducida por su sabor único; y a lo largo del siglo XVIII llegó a España y sus colonias, sobre todo México.
Sin embargo, también hay quien cuenta que el origen del Roscón de reyes está en los romanos, quienes celebraban a principios de enero una fiesta en honor al dios Jano en la que se comían pasteles que contenían un premio.
La fiesta francesa Le Roi de la Fave, que data del siglo XI, se considera la continuación de esa fiesta romana. En esta festividad era tradición introducir una haba en una rosca dulce y la persona que la encontraba en su pedazo de pastel era coronado rey por un día.
Aunque haya dudas sobre su origen, lo que no cambia es su sabor exquisito y su forma de corona de frutas escarchadas que imitan a la perfección las piedras preciosas, tan propias de una corona de reyes.
Sea el que sea su origen, no puede faltar este magnífico dulce en un dia tan mágico como es la festividad de Reyes.